Como uno de nuestros propósitos del nuevo año, teníamos el construir o ampliar el baño para que cupiera la bañera con patas de león que trajimos del monoambiente en el que vivíamos con Mimi, cuando todavía seguíamos en el distrito cinco. En tanto esto no fuera un hecho, la bañera se movía de un lado al otro de la casa y esta noche había terminado en el centro mismo de la sala, que no era especialmente grande, nada en la vieja casa de mi abuela lo era, pero la chimenea encendida y un par de hechizos se encargaban de que fuera la estancia más cómoda y cálida para pasar las bajas temperaturas de las noches de invierno. El sillón al que logramos sacar el penetrante olor a humedad servía para dar cabida al menos a tres personas, la bañera a otras tres más y si no quedaba la alfombra frente al fuego.

Después de un par de sorbos en la cena de celebración y las primeras botellas cortesía de Holly que fueron quedando vacías, el calor comenzaba a subirse por mi garganta. Tirada como estaba dentro de la bañera, con mis piernas dobladas para que los pies pudieran apoyarse en el borde, uso mi dedo índice para apuntar a Hero. —¿Todo un año de besos castos con Sage o una vez de la que nunca se hablará con Oliver Helmuth?— le pregunto, me echo hacia delante con tanta violencia que me provoca un mareo y es que mi alarma es real. — Hero, tu sabes quién es Oliver, ¿verdad? Era tu vecino, ¿no?—. Y es que el universo bendice a pocas personas con milagros así de tener un vecino como estos, el resto somos parte de una larga lista de seguidores en Wizzardface, o ni eso, que cerré mi cuenta apenas me mudé con Mimi. No iba a ponerme a compartir historias de nuestro día al día en el cinco y menos con mi novio-nonovio, ¿no?      

Codeo a Holly que tengo a mi lado. —Estos juegos se me dan fatal, piensa tú una pregunta— le pido, que algo hay que hacer mientras pasa la madrugada y lo que trajo Beverly hace efecto en el resto de las chicas, que yo la quiero, pero nuestra amistad encuentra su límite en las drogas, me preocupa ser de esas que se largan a llorar como una bebé por nada y por eso mismo voy midiendo los últimos sorbos que le estoy dando al vodka, que ya siento que me está pesando la cabeza.

Que los chicos se queden solos después de la cena me da cierto pánico, así que soy más que feliz teniendo la excusa de pasar un rato con mis amigas, celebrando de que tendremos todo un nuevo calendario para tachar con la esperanza de que el siguiente sea incluso mejor. Estoy tirada sobre un sofá con las piernas colgando por el borde y uso a mi sobrina de almohada, que por suerte ha podido escaparse de su padre después del brindis con la excusa de una salida entre amigos. Al contrario de ellas, solo he bebido un sorbo de champagne al momento de brindar y luego he observado como ellas se encargan de consumir el alcohol, así que soy la que anda poniendo música desde mi lugar, apretando los botoncitos de “next” hasta encontrar la melodía más alegre y pegajosa de Brittanny Pearce.

No me espero que la pregunta inicial de la ronda de confesiones caiga sobre mí y me siento enrojecer — ¡Que eso no se vale! ¿Acaso han visto lo apuesto que es Oliver? — suspiro, porque creo que esto es una tragedia y de verdad extraño las vistas de verano de la isla y sus bellas playas — Tendré que ir con besos castos con Sage. De momento, no puedo quejarme de eso — ay, que horror. Pico la costilla de Meerah — Besar, acostarse con o casarte con… — me pico el mentón. ¿Quienes andan solteros y no me armarían un problema en este lugar? Eso me descarta a Kendrick. ¡Y Simon es el hermano de Syv! — Kyle, James, Dave — muevo mis cejitas, que lo que salga de esto de seguro vendrá para charlas luego.

Tengo un brazo ocupado en peinar los cortos cabellos de Hero que está apoyada encima mío, y el otro con un vaso cuyo contenido no reconozco pero que se me hace bastante rico a decir verdad. Me he cerciorado antes de aceptarlo igual, que no provenga de Beverly. Es Mimi la que preparó un trago que tiene limón, azucar y alguna bebida blanca que no es tan fuerte como para no pasarla. Nada de borracheras igual, lo sé. Que aunque tenga el permiso de estar afuera, no quiero enfrentarme a ningún sermón por llegar a casa con resaca… otra vez.

La pregunta de Syv me hace reír y mirar a la pelirroja con curiosidad, y cuando da su veredicto suelto un “bah” antes de tomar otro trago de mi bebida. - Dices eso porque está con Maeve. Seguro que tu respuesta sería otra de lo contrario. - La acuso en chiste en realidad, porque la conozco y es muy leal pese a que Oli esté tremendo, así que aunque los otros dos no sean una parejita oficial, era muy obvio la cara de bobo que tenía el muchacho para con Mae. - ¿La versión oficial no tiene el “matar”? - Consulto cuando Hero decide que es mi turno. - Mmmm… Besar a James que ya lo he hecho, supongo que acostarme con Kyle… - Me doy cuenta de mis palabras antes que nada y me apresuro a aclarar antes de que mi tía empiece con sus planteos. - No lo conozco casi nada, y puedo fingir demencia o borrachera luego. - Aseguro, sabiendo que es una situación hipotética y no me estaba condenando a nada. - Y casarme con Dave, por supuesto. Que ya hemos hablado al respecto y estamos esperando a mi mayoría de edad. - Aseguro. Claro que me río luego, porque todo se trata de chistes y bromas para molestar a Charlie y no creo que ninguna en esta sala pueda tomarme en serio.

- Mmm…. - Medito un poco, pero la verdad tampoco se me ocurre nada. - Tomo la sugerencia de Synnove. Mejor pregunta tú, que yo soy pésima para esto. - Levanto el vaso en dirección a Holly para señalarla, y luego me lo llevo a los labios para terminar el poco contenido que queda en un par de tragos.

Debería hacer esto más seguido, sin tener la excusa de festejar un año nuevo. Y con “esto” me refiero a estar tirada dentro de una bañera en una sala, con las patas colgando por el costado y usando el hombro de Syv como almohada por culpa de la cantidad de alcohol ingerido. Aún así, sigo abrazada a mi largo vaso repleto del trago que me preparé con un poco de jugo y vodka en lo que las preguntas van y vienen, haciendo que me ría entre dientes — ¿Qué clase de imagen tienen de mí, para creer que soy la indicada para hacer estas preguntas? — comento con gracia, me separo de Syv y muevo un poco mi vaso, chequeando que se mezcle un poco mejor. ¿Por qué siento que Hero y Meerah han sido demasiado escuetas con sus respuestas? Me las quedo mirando con los ojos entornados y los labios fruncidos en una sonrisa ladina, de esas que deberían dar un poco de miedo.

Tras dar un largo trago, chasqueo los dedos en el aire y me obligo a pasar el líquido — Pregunta general — levanto la mano para que me presten atención — ¿Con quienes han fantaseado? Dígase: imaginado en situaciones comprometedoras o sentido un poco de calor en las bragas — muevo repetidamente mis cejas y tonteo con el vaso sobre mis labios — No me creeré que ninguna ha sentido nada de eso, que aquí todas tienen historial. Yo tengo una lista — me pico el mentón, tratando de hacer memoria en lo que cruzo mis pies en el aire — Ken parece tener buenos brazos y Kyle está sacando espalda, lo mismo Sage, si me permiten una observación apreciativa. Aunque admito que me he preguntado cómo debe lucir David sin ropa, después de tantas preguntas que he recibido en el trabajo sobre él. Y James es flaco, pero siendo tan alto debe ser divertido de trepar — me encojo de hombros y acabo mi vaso, que se supone que estamos aquí para ser sinceras.

Estiro las piernas a lo largo de la alfombra mientras me recargo en la bañera, jugueteando con mi varita y cambiando una de las patas de león por la de otros animales, las pezuñas de cerdo se me hacen divertidas, no así la pata de elefante que casi me aplasta la mano contraria, y creo que en definitiva esa última era la de una gallina y no la de un dragón. Nunca había visto un dragón como para poder cerciorarme de ello. - ¿Helmuth? ¿No es el renacuajo flacuchento que se la pasaba con el grupito de insoportables? El primo de Jenna… ese que sonreía demasiado y no le haría daño ni a una mosca. -  Creo que era el hijo de uno de los ministros, no estaba segura de recordar bien cuál luego de unos cuantos vasos de más; pero extrañamente podía venirse a mi cabeza la imagen del compañero con el que compartí curso hasta los quince. ¿Así que se había puesto bien? Quién lo diría…

- La imagen correcta, Holly. La correcta… - Llevo el vaso a mi boca y cuando lo encuentro vacío miro el fondo con decepción. Creo que todavía debía quedar algo en la jarra, y sino siempre se podía preparar un poco más. Me incorporo soportándome contra el borde y voy hacia la cocina que se encuentra a pocos pasos de ahí. Las ventajas de una casa con este tamaño era precisamente eso, que mis piernas largas me llevaban a donde quería en momentos nada más. - Observación apreciativa sería señalar el culo que tiene Ken y no solo sus brazos. - Mi voz se alza un poco gracias a la distancia y al ajetreo que hago al buscar otra botella dentro de la alacena para preparar un poco más de bebida. - Sin ofender, Albi. Es solo una observación. - Aseguro antes de que piense que ando interesada en su novio, o no novio, o lo que sea. - La verdad es que la madurez le está pegando bien a todos. Y si terminan como el padre de Jared… pues que lindo panorama a futuro. - Hablo desde la puerta mientras mezclo la nueva jarra, y en lugar de servir cuando termino, la llevo hasta la sala por si alguien más quiere servirse.

Con que esto era una reunión de amigas, estaba extasiada. Siempre había leido sobre ellas y visto las peliculas ahora que podía, y siempre había querido experimentar una. Las fiestas estaban bien, pero había otro ambiente en esta situación, como de comodidad y relax. Supongo que tenía que ver que fueramos solo las chicas.

Me acomodé un poco mejor en el borde del sillon para alcanzar las galletas de azucar que había traido, no las habian tocado mucho, lo que me daba pena porque esta vez le había puesto casi nada de droga para que pudieramos hablar mucho y nadie se durmiera.

- Tienes una foto de este Oliver - le preguntó a Meerah a quien tengo al lado, todas parecian saber quien era este muchacho y realmente quería saber si estaba tan bueno.

Muerdo la galleta mientras Meerah respondé la pregunta de Hero, y me alegra saber que mis habilidades cupidescas habían dado en el clavo cuando la vi interactuando con Jim.

- Pues puedo decir que Kyle lo hace bien y no es mal chico si te interesa - le comento, pero hago mala cara cuando dice de Dave como marido, seguro sería de esos aburridos y repetitivos, que tendrían algun que otro momento de flash de diversión pero se acabaría pronto, como cuando cantamos Abbracabra.

Mientras termino la galleta Holly empieza a enumerar lo que le gusta de cada uno de los chicos y eso me lleva a repasar a cada uno.

- Si soy sincera he fantaseado con todos y ustedes en algun punto, son muy guapas chicas, sépanlo - lo dije mirando a donde estaban Holly, Mimi y Syv, esperaba no ponerlas incomodas pero era la verdad, en el 14 solo había pasado tiempo con Zenda y Lila y aunque la última tenía cierta belleza eterea siempre la sentí más como una hermana mayor - Y si creo que todos van en camino a ser como Seth, aunque si alguno se pone más grandote seran más como Ben - lo que me hacía pensar en su relación no cumplida - ¿A quienes emparejarian entre sí? - o sea, sabia que Ken y Kyle y Sage y Jim tenian bromances, pero también podía surgir un Ken&David por ejemplo.

¡Lo sé! ¡Sé que lo que le pido a Hero es muy difícil de responder! Si yo misma tuve a Ken y Oliver así, uno al lado del otro, es un dilema muy serio. Me inclino sobre el borde de la bañera para poder contestarle a Mimi. —No tiene nada de renacuajo flacucho ahora, ¡si vieras sus fotos en Wizzardface! ¡Mimi, que no te imaginas los brazos que tiene! Y toca la guitarra sin camiseta, uff, ¿sabes cuántos likes tienen esas fotos? Que yo no sé si es que tocas mejor la guitarra sin camiseta o qué, pero a la gente parece gustarle…— la pongo al tanto de cómo fue madurando nuestro compañero del Royal, en lo que Hero pone en otro desafío a Meerah y a mí me parece una buena pregunta, con buenas elecciones.

Es cuando Holly se pone seria que me tengo que agarrar al borde porque me espero cualquier cosa de ella, y correcta, que es la palabra que uso Mimi, no es un calificativo que venga a mi mente, por si las dudas le echo otro trago a mi bebida. ¡Ah! Nada que no pueda contestar, mi respuesta es tan simple y patética que casi la digo, el problema es que MIS DOS MEJORES AMIGAS ME COPIAN LA RESPUESTA. — ¡Mimi! ¡Que tienes otros culos para apreciar! Aparta tus ojos del culo de mi no novio— hago el gesto con mis manos de espantarla y que se ponga a distancia, para que sepa que estoy bromeando me inclino otra vez hacia ella para pasar mis brazos por delante de su cuello y abrazarla.

Desde ahí puedo responder a Beverly con un: —¡Awww, Bev! ¡Tú también eres muy guapa! Te besaría de estar un poco más borracha—. Su pregunta es la que me despierta dudas, porque abre todo un universo de posibilidades en mi cabeza. —¿Emparejar… chicos y chicas? ¿Entre nosotras? ¿Entre los chicos? Yo sigo esperando el día en que Holly y Mimi me confiesen que han estado enamoradas desde siempre y Holly venga a vivir con nosotras. Espero que me lo digan pronto para no quedar como una boba que anda tratando de emparejar a Mimi con Jim. También, si algún día Ken corta conmigo por otra persona, espero que sea por Kyle… creo que eso mi corazón podría aceptarlo.

Era ciertamente molesto el estar hablando tan abiertamente de Oliver, cuando no podría irle con el chisme luego. Que sí, se reiría de que anden opinando así de él, pero no sé si le gustaría enterarse de quienes conformaban mi nuevo grupo de amistades. La pregunta de Beverly me hace molestar a Hero unos segundos en lo que saco mi teléfono del bolsillo y abro la galería con las fotos improvisadas que saqué antes de haber hablado con Dave para que sea el fotógrafo oficial de mi línea. Sus fotos en WizzardFace eran una cosa, pero ¿cuántos podrían decir que Oliver Helmuth había modelado para ellos? Ten. - Se lo entrego a Bev. - Si te gusta algún diseño planeo comercializarlos el año entrante si todo sale bien. - Dudaba que viera particularmente la ropa, pero no estaba mal el remarcarlo. ¿Podría traer mi línea hasta el nueve?

La información acerca de Kyle me tiene sin cuidado alguno y simplemente me encojo de hombros ya que como dije, todo era una situación hipotética. Es la pregunta de Holly la que me hace sonrojarme y por un momento me arrepiento de haberle cedido mi turno. No había fantaseado con nadie en sí, no de la manera en la que podrían pensar, pero el calor… el calor era una sensación que en ocasiones me era familiar y… ¿por qué le había cedido la pregunta? Ni siquiera el que Beverly se adelante en la respuesta hace que la mirada penetrante de Hero se aparte de mi rostro y sé que no podré zafar, porque la conozco. No descansará en toda la noche a menos que responda.

Creo que Mimi debe notar mi dilema porque se acerca a servirme cuando nota mi vaso vacío y de paso se hace con mi celular de las manos de la rubia, supongo que para mirar ella también las fotos de Oliver. - Solo voy a decir, y a fingir demencia luego, que si mi memoria no me falla Jim sí es divertido de trepar. ¡No en ese sentido! - Me apresuro a aclarar mientras que mis mejillas se vuelven de color carmesí. - Y que Kendrick también tiene lo suyo… Fue el primero que me llamó la atención a decir verdad. - ¿Y por qué digo eso? Es claro que el alcohol me suelta la lengua, porque sobria jamás estaría diciendo nada. - ¡Fue hace más de un año, Syv! Lo prometo. - Trágame tierra. De verdad. Trágame. Lo malo es que la tierra no lo hace, así que en compensación soy yo la que se lleva el vaso nuevamente cargado y comienza a vaciarlo casi sin respirar. - Negaré haber dicho eso, no importa cuánto insistas luego. - Le aseguro a Hero. Luego de eso decido que es mejor cerrar el pico. No voy a opinar acerca de mi tío, y creo que me quemarían en una hoguera si digo que Benedict Franco no se me hace especialmente atractivo. - Ya lo de armar parejas lo vuelvo a dejar en sus manos. Que recién estoy conociéndolos como para andar haciendo de celestina.

— ¡Ay, por Morgana! — se me escapa la risa boba y nerviosa cuando la pregunta de Holly cruza el aire con tanta sinceridad que hace que me cubra la cara con mis dos manos, justo antes de girarme para mirar a mi sobrina con una sonrisa burlona, que ya hemos tenido charlas por el estilo y jamás consigo sacarle nada — ¡LO SABÍA! — exclamo con demasiado ímpetu en lo que me enderezo en el sillón para poder apuntar a Meerah con un dedo — ¡Sabía que Jim te atrae y sabía que Ken te había gustado! Eres una n-e-g-a-d-o-r-a — hago rodar un dedo hasta picar su nariz, que supongo que será una cualidad de familia porque yo sé muy bien que he pasado como un año que Sage me gustaba hasta dar el primer paso. Y como todas andan de honestas, sé que yo no puedo ser menos — Siempre quise besar a Harrison Trotter — suspiro con fuerza, que el muchacho dos años mayor que yo en el Royal siempre había sido un sueño — Y sé que nuestros compañeros son atractivos, pero admito que Sage fue el primero que… bueno, es que una vez lo atrapé en la ducha en mi casa y como que… ya saben… — es un poco vergonzoso decir esto, la única que en verdad sabe los detalles es Maeve. Aún así e ignorando el rubor, me agito las manos para ventilarme la cara en un intento de darme a entender.

¿Armar parejas? No puedo evitarlo, se me arma una expresión de ternura y llevo mis puños a mi mentón porque tengo que confesar que la imagen de Mimi y Holly se me hace adorable, aunque la segunda ahora mismo parezca querer morirse de risa ante la idea — Beverly no parece tener quejas sobre Kyyyyle… — dejo caer como si nada, mirando a la rubia con picardía — Aunque… ¿Qué me dicen de Kyle y Simon? Sería una pareja extraña — y eso lo hace todavía más entretenido de pensar. Me pongo de pie, a ver si de esa manera puedo subir un poco más la música y acabo por hurgar las botellas. ¿No hay nada sin alcohol por aquí? — Yo tengo una duda — admito — ¿Cómo es que saben cuándo están listas para… hacerlo? — no tengo que mirarlas a los ojos, si no lo hago no pueden hacerme daño. Aún así, paso las botellas con mayor rapidez hasta dar con una que tiene jugo de limón — Es que… Hemos estado con Sage hace casi un año y aún no me atrevo a… ¿Cómo saben que es el momento y la persona adecuada?

Empiezo a reírme con fuerza, porque la declaración de Beverly era algo que no estaba esperando y tengo que llevarme una mano a los labios para lanzarle un beso — Cuando quieras — bromeo, cosa que me dura poco porque el resto sigue con sus ataques de sinceridad. Nada que no supiera hasta el momento, aunque no puedo evitar arquear una de mis cejas con gracia por la discusión entre las niñitas del Capitolio — ¡Vaya, que la señorita Powell resulta que tiene hormonas! — me mofo como modo amistoso de pique, que es divertido ver a las personas correctas salirse de su lugar cómodo. Ni hablemos de que Niniadis confiesa que vio al que era a su esclavo en la ducha, cosa que hace que me atragante y escupa parte de mi trago. ¡Eso sí que se lo guardan en la televisión!

Ni me molesto en acotar cuando empiezan a armar parejas, creo que todas aquí sabemos que se me da fatal y solo hago un puchero cuando me quedo sin bebida, así que miro a Mimi con mis mejores perros de cachorro. Lástima que no me duran, que Syv hace uso de su imaginación para hacerme reír con fuerza — ¿Ves, Mimi? Te dije que éramos tal para cual — le indico a la morena, moviéndome a ver si puedo verla mejor sin abandonar la bañera — Por eso debes hacerme los mejores tragos, así después te los pago con besuqueos. Yo sospecho de que David es bisexual — acabo declarando — Aún desconfío de cómo mira a Ken. Lo siento, Syv — pobre, que vivimos pidiéndole disculpas.

Tengo que sentarme algo más derecha para poder ver a Hero cuando se pone seria y, a decir verdad, no me esperaba que salga con esa — Espera. Tienes un novio como Sage hace como un año… ¿Y aún no lo hicieron? — debe ser una especie de récord hormonal. Sé muy bien que no soy la persona indicada para dar estos consejos, así que mis ojos van directamente hacia Syv, que parece ser más de la onda romántica de la colorada — En mi caso, no le di mucha importancia. Jamás lo hice por amor — hago una mueca, no es que esté orgullosa de ello, sino más bien sé que es lo que me ha tocado. Tengo mala suerte en el ámbito, qué decir — Tenía tu edad y no me sentía completamente segura, pero fue una situación muy particular en la cual preferí andar con este sujeto a terminar en la calle. Pero para ti es diferente. Si ustedes se quieren y se respetan, llegará un momento en el cual simplemente… lo sabrás. Todos los cuerpos son diferentes, lo que importa es tu comodidad — me encojo de hombros, que dudo que exista un manual de instrucciones para esto.

No solo mis mejores amigas, ni Beverly que fue el primer amor de Ken según lo cuenta ella misma, también la chica que no creía que podía tener relación alguna con Ken ¡lo conoce desde hace un año y le gusta desde entonces! Mi decaimiento es tal que tengo que soltar a Mimi y hundirme en la bañera para abrazarme a la botella. —No sé si quiero salir con un chico al que todas mis amigas ya le echaron el ojo— murmuro, muevo los labios con lentitud porque sigo estupefacta. Una que le mira esto, la otra que le mira lo otro, una que ya lo ha manoseado todo y luego también Meerah… —Hero, ¿tú qué opinas de Ken?— le pregunto a la pelirroja y ruego para mí, se lo digo con los ojos incluso, que espero que su respuesta sea que le parece feo, horroroso, yo le haré el mismo favor al referirme a su novio. ¡Y ni borracha digo lo mismo que Bev dijo sobre Kyle! Pobre de Ken, tendré que echarle mala fama o morderme la lengua para no decir nada que les pueda dar más material para fantasear…

Estoy con la boca de la botella en los labios cuando la pregunta de Hero me sorprende, no, que ya dije que yo no iba a contar nada sobre eso, sí me gustaría poder decirle algo y escuchar lo que las chicas puedan compartirle también, hay algo cálido en que la sala de la casa y entre nosotras haya confianza para preguntar cosas así, y que no todo sea cosa de los tragos de Mimi y las galletas de Bev. —Puede ser un año o un mes, lo del tiempo creo que es cosa de cada persona y también de cada pareja. No tiene que ver con la edad…— le doy mi punto de vista, no me voy a poner filosófica, sino hablarle desde como lo viví yo, hablarlo abrazarla a la botella en la bañera y mis pies en el borde con las rodillas contra el pecho. —El primer chico al que besé fue a Ken y fue después de cumplir los veinte— chasqueo mis dedos en el aire. —¡La noche en que nos encontramos con Oliver Helmuth y Ken besó a la amiga de Oliver!— lo recuerdo, ¡que coincidencia! Esta noche no hicimos más que hablar de Helmuth, ese chico está en todos lados. —Y luego de unos meses, lo hicimos. No sabíamos si nos estábamos apresurando, si estábamos listos, Mimi sabe que no nos fue muy bien y fue quien nos tuvo que ir a hacer la compra de emergencia. No creímos en eso de estar listos, sino en que es algo que quieres compartir con esa persona.

- Y yo aquí enterándome tarde de esos datos. Muy mal, Albi. Muy mal. - Me río más que nada porque llevo tiempo sin chusmear a mis ex compañeros y no tengo idea de cómo han terminado algunos. La genética Helmuth no es precisamente mala, y hasta el padre de Oliver era bastante buen mozo.

Un segundo, ¿Beverly se había acostado con Kyle? Si tuviera un reloj en la muñeca lo hubiese mirado porque claramente que se estaba pasando el tiempo y me estaba quedando atrás. Diría que no era justo, pero no estaba tan ebria como para no reconocer que el todavía tener ese asunto pendiente no era por culpa de mi histeria. Ya que. - Oh, vamos. No es un crimen apreciar las cosas que están bien. Todos tienen lo suyo, pero en competencia de culos tu no novio gana. - Al parecer, sí  estaba lo suficientemente borracha para esto.

- Déjame un par más de estos encima y lo hago por tí. - Levanto la jarra en alto y avanzo a lo largo de la habitación, riéndome por las ocurrencias de las parejas que se van armando, y sobre todo por el rubor de la rubia más pequeña. Era comprensible que opinara de esa forma, nadie la culpaba. No importaba que Hero saltando enseguida a acusar. Al menos recupero el teléfono en cuestión y me distraigo mirando las fotos de mi ex compañero antes de levantar la cabeza cuando algo me llama la atención. - ¿Simon y Kyle? - Pareja rara si podía ocurrírsele. - Creo que de momento los más acertados son Holly conmigo, que si podemos invitar a Jim no creo que ninguna diga que no… Kyle y Ken, ¿creen que Dave se les sumaría? No pensaba que fuese bisexual, pero quien sabe. Y bueno, ya que lo admitió, Syv con Bev si quiere… ¿Qué dices Meerah, a dónde te gustaría sumarte? - Aprovecho a preguntar que en mi esquema de parejas la pobre se ha quedado afuera. Hero con Sage obviamente, que es la única que portaba título oficial y que al parecer, quería ponerle el sello al final de la hoja.

- Yo no soy la persona adecuada para opinar demasiado. Pero creo que lo importante es que debe ser tu decisión. Fue la mía el no acostarme con nadie todavía, pero no es porque creo que no esté lista, simplemente… no se dió. - Incluso aunque llevasen casi un año, ese tipo de medidas de tiempo no debía importar. La pelirroja era joven y si quería ir a buscar a Sage ahora mismo o quería esperar otro año, daba lo mismo. - Mientras que como dice Syv, si tu crees que es con él con quien quieres compartir eso, y te sientes segura cuando una situación se esté aproximando a pasar al siguiente nivel... Pues ya verás como te sientes en el momento.  ¿Él no te está apurando, no? Que los calladitos suelen ser los peores y creo que acá ninguna tendría problemas en ir a aclararle un par de puntos.

Observo las fotos del tal Oliver y debo aceptar que todas tienen razón y esta muy bueno, pero algo que he notado es que todos del otro bando ¡Lo estan! Lo cual es una pena realmente porque no puedo admirarlos tranquila sin sentirme mal porque me creen a mi y mi familia basura que debe ser eliminada. ¡Ah! el problema de cuando los villanos estan para darle y cuestionas tu moral.

- Me gustan tus diseños, yo también hago ropa- le digo a Meerah, aun no hemos hablado mucho y se que es familia, pero se siente raro, no es lo mismo con Hero que necesitaba hacerle saber que podía contar conmigo en ese momento y por eso se lo dije, esta es nuestra segunda vez encontrandonos y había distracciones en la anterior ocación como mi sentido romantico activandose - Debe ser algo de familia - digo medio a la pasada.

Vuelvo a meterme en la conversación grupal cuando Syv y Holly me devuelven el cumplido, lo cual hace que me sonrojé un poco porque es diferente saberlo que te lo digan. Y saber que Hero y yo estamos fangirleando por la unión de Meerah con Jim me hace querer un poco más a la pelirroja y conciderar unirla a mi segmento de cupido. Me distraigo con algo que dice Syv.

- Pero piensa que él te quiere a tí - le digo para animarla y vuelvo a captar algo más por parte de Hero - Pues no, por algo me acoste con él - le respondo cuando habla de Kyle, no me cuesta imaginarlo con Simon y ahora me da curiosidad saber que pasaría si los pongo juntos en el mismo lugar.

Todas siguen tirando parejas y parece que el Ken&Dave no solo yo lo había visto, aunque opino como Syv y el Ken&Kyle es más canon. El Mimi&Holly también me parece lindo. Pero la conversación toma un camino más serio cuando Hero habla de que aun no ha tenido sexo con Sage, lo cual me sorprende porque no hubieramos hablado de ello cuando nos juntamos. ¿Cómo se me había pasado?

- Yo no creo que debas esperar estar totalmente lista, digo nadie lo esta la primera vez realmente - señalo a Syv como ejemplo - Bueno yo si tenía forros, pero porque estoy preparada para que pasé cualquier cosa, aunque realmente no sabía que lo hariamos cuando lo hicimos. Lo que quiero decir es, deberias ir tanteando. Dediquense un tiempo para ustedes, para conocerse, vean juntos cual es su limite y si realmente no quieres seguir o no te sientes comoda simplemente di que no, como dice Mimi le saltararemos a la yugular si te apura o fuerza a algo. Solo digo que esperar el momento especial, la noche especial, puede ponerte más presión y miedo del que ya sientes. Hacer algo nuevo siempre da miedo, la cuestión es si te dejas guiar por el miedo o das el salto - mamá era muy sabía y me alegraba poder dar sus lecciones a otros - Además los he visto y se nota que te quiere muchisimo, creo que hara todo lo que pueda para hacerte sentir bien y feliz. Solo recuerdame darte forros y te explique como se usan.

Luego de como mamá había quedado embarazada, casi todas las mujeres del distrito se habían asegurado de que supiera sobre protección. Sobretodo cuando empecé con el yoga al natural.

No me esperaba que la pregunta fuese dirigida especialmente a mí y parpadeo en lo que me fijo en Synnove, tratando de encogerme un poco en mi lugar — Bueno… — ¿A mí me gustaría que todas mis amigas se estén babeando con mi novio? Pues claro que no, no importa que sea una figura pública que de seguro estimula a otras cientos de adolescentes que ni siquiera conocemos. Ah, la parte de ser centro de atención, creo que esa no se la voy a contar — Es atractivo, pero jamás lo he mirado de esa manera — admito y me guardo la parte en la que tuve intenciones de emparejarlo con mi sobrina — Hacen una pareja preciosa — agrego, que nunca está de más. ¡Y de verdad lo pienso!

Jamás pensé que tendría un grupo amplio y variado de amigas tan dispuesto a darme sus opiniones honestas frente a este tema y, mucho menos, creí que lo preguntaría por culpa de Sage. En casa, allá cuando me juntaba con las personas del Royal, nos preocupaba más hablar de vestidos y las chicas con las cuales me reunía no me daban la confianza para hablar de esto. A decir verdad, tampoco era un tema de interés en ese momento y la edad también influye, pero puedo decirlo… me agradan estas chicas. Con sus diferentes formas y pensamientos, con su facilidad para ser amigas y valientes, como una pequeña secta que no espera nada de ti a cambio. Y debe ser por eso que escucho sus opiniones al pie de la letra, sin decir ni una palabra y solo asintiendo de vez en cuando, hasta que puedo sonreír de lado.

— Si les sirve de algo, Sage jamás me ha forzado a nada — es mejor dejar eso bien en claro — Incluso casi nunca hablamos de eso y él dijo que no le importa, porque solo le basta con estar conmigo, pero es que… No es que no quiera hacerlo, solo… Me da miedo y vergüenza — ¿Y si algo sale mal? ¿Y si soy horrible en ello? No podría soportar pasar por ese bochorno. Me rasco la nuca y doy un sorbo a la limonada — Supongo que eso es normal… ¿No? ¡Pero yo sé que lo quiero! De verdad, de verdad, nunca nadie me había gustado así. Fue mi primer beso y si tengo que hacerlo con alguien, quiero que sea él — solo no sé cuando. Me percato del montón de cursilerías que he dicho cuando me callo de una vez y, resignada, dejo la limonada y tomo una latita de cerveza. Aunque vacilo, le doy un trago y la bajo con toda la cara fruncida, porque sabe a orina — Asqueroso — la empujo, aunque trato de quebrar mi expresión en una risita — Nunca se los dije, chicas, pero en verdad las quiero. Es genial tener con quienes hablar de esto.

Ella podía saber todo lo que quisiera, yo sabía que se iba a poner así. Incluso sabía que se iba a salir de mi regazo, momento en el cual aprovecho para retirar mis sandalias con los dedos y subir los pies al sillón. - Y voy a seguir negándolo. Dije que lo haría. - Había sido una advertencia justa antes y después de haber hecho esa declaración de la que no volvería a hablar. Lo malo es que no puedo decirle nada luego, porque lo de Harrison Trotter era mucho más razonable que Patrick, y lo de Sage… De acuerdo, eso no me lo esperaba, pero no provocaría nada el burlarme al respecto cuando actualmente estaban saliendo. No tenía gracia. - Tengo catorce, no séis. Se supone que esto de las hormonas es normal, ¿no? - Y si no lo era, pues era una adelantada de la época. Nuevas generaciones y todo eso…

La pregunta de Hero me toma por sorpresa y definitivamente no sé qué responder a eso. Al contrario, yo tenía más dudas que ella y ni siquiera tenía alguien con quien considerar esa situación. No sabía si era algo que se planeaba, o si se tenía que esperar, o nada en realidad, así que al igual que Hero, me quedo escuchando cada una de las respuestas que le dan, tratando de asimilar la información. Me distraigo claro está, cuando Syv vuelve a hablar de Oli y de una amiga que había besado a Ken. Oliver no tenía demasiadas amigas, solo conocidas que querían entrarle, sus primas, Maeve y yo. Así que a menos que hubieran drogado a Jenna para llevarla a un club, eso solo me dejaba a Mae y me moría de curiosidad por preguntarle al respecto.

No me espero tampoco que alguien como Mimi no lo haya hecho, pero Beverly, que tiene casi mi misma edad sí. Así que me quedo algo más perdida que antes, y a la vez mucho más ubicada. Son buenos consejos para mi tía, y muchos yo mismo los estaba apuntando mentalmente. Era lindo sentir que existía la confianza suficiente como para poder hablar de estos temas sin que nadie te acusara de ser una puta, o de ser una ignorante. - Yo solo voy a decir, que no creo que tengas nada por lo que avergonzarte. Nada. - Era bonita, educada, segura, atenta… Incluso aunque fuese solo un año mayor que yo, Hero no era en absoluto un mal ejemplo a seguir. - Así que si quieres que sea con él, pues que pase lo que tenga que pasar y ya. Es Sage, si no tuvo problema en esperar, tampoco creo que tenga muchos problemas en el acto en sí mismo, ¿no? - Y no voy a opinar más al respecto porque me siento completamente fuera de lugar y sin una pizca de autoridad en el tema. Suelto un “awwww” cuando mi tía declara que nos quiere, pero Beverly me gana cuando va a abrazarla y tengo que ponerme de pie para no morir aplastada en el intento.

Pese a todo el alcohol que pueda estar pasando de mano en mano, también las galletas de Beverly, el golpe de realidad es muy fuerte cuando Hero dice que nos quiere y es genial tener amigas con las que hablar de esto. Hasta hace unos pocos meses, ella y Meerah estaban viviendo en la isla ministerial, Beverly estaba en el distrito catorce, Mimi y Holly se conocieron el distrito cinco, pero Holly fue a trabajar al ministerio, se mudó al Capitolio, yo me mudé al distrito cinco y me fui a vivir con Mimi. Nunca hubiera podido fantasear por mí misma que podría estar en la sala de la casa vieja y abandonada de mi bisabuela materna, tomando tragos con toda confianza entre chicas de más o menos mi edad, hablando de todo esto, con lo importante que suele ser al tener la edad de Hero, preguntar algo así. Como Holly es la que me queda más cerca, me acurruco contra su hombro al ver como Beverly abraza a la pelirroja y Meerah tiene que ponerse a salvo.

Momento cursi que se interrumpe cuando de soslayo percibo que hay movimiento fuera de la ventana, las cortinas corridas para poder ver la nevada que a estas horas paró. —Creo que hay alguien afuera— digo, incorporándome todo lo más a prisa que puedo para quedar sentada y pidiendo con mis palmas en alto que nadie haga ruido, ni se mueva. —¿Quién tiene su varita a mano?— pregunto en un susurro, que la mía habrá quedado al lado de alguna de las patas de la bañera. Esto yo lo vi en películas, el asesino serial de las fiestas llega justo cuando las chicas del grupo de amigas están borrachas y vulnerables. Saco mis piernas de la bañera para ir en puntillas hasta la puerta y por la ventana angosta que está a un lado puedo reconocer algunos rostros, le pido con un gesto que esperen y vuelvo corriendo a la sala, abro mis brazos para quedar apoyada con mis manos al umbral que separa la habitación del pequeño vestíbulo. —Chicas, ¿quién de ustedes contrató strippers?— bromeo, claro que lo hago antes de abrir la puerta, que no quiero que me escuchen. —No va en serio, hay chicos fuera, les doy dos minutos para que se pongan presentables…— aviso, no creo que ninguna mueva un pelo.

Claro que no venían con intenciones de dar una serenata de nada, en minutos estamos alrededor de la mesa del comedor con los vasos cargados de los tragos de Mimi y Holly Marca Registrada en un falso beerpong. Uso la pelotita amarilla que tengo entre los dedos para hacer el amago de lanzarlo. —Yo te elijo, Kendrick Black— lo apunto, así hago que se pare a mi lado mientras esperamos que otros dos se coloquen en la otra punta de la mesa. —¿Comenzamos? ¿Listos?

- Como los chicos se sumaron al rol como pueden leer en el post de Ken vamos a hacer unas vueltas más de rol y un juego.

- Elijan sus parejitas y vayan pasando, chiquelos.

- Vamos a tirar cada uno tres dados de azar para saber la resistencia al alcohol en juego.
Ningún fallo: Tu resistencia es muy alta, felicidades, terminas el juego sobre tus dos pies.
1 dado de fallo: Tu resisencia es buena, terminas algo atontado.
2 dados de fallo: Tu resistencia es media, se te revuelve un poco el higado.
3 dados de fallo: Tu resistencia es baja y terminas para el culo.

Estos son parámetros generales, cada uno puede pensar su justificación in rol en lo que va el desarrollo del rol y obviamente, cada uno es libre luego de cómo termina su personaje la noche en sí, que no es la idea condicionar el rol de nadie.

- ¿Quién gana? Nadie gana, es solo excusa para beber.

- Es broma, sí hay ganadores. En cada ronda de equipos, gana la pareja que más aciertos sacó entre los dos.

-Si hay dudas o quejas sobre las reglas del juego, comuniquese con el staff del foro, por favor lo hablamos en el grupo. (?)

El miembro 'Synnove A. Lackberg' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Azar' :

Venir a molestar quizá es una de las mejores ideas que he tenido en la noche. Es fácil olvidarse de la discusión cuando la atención se la lleva uno de esos juegos que pensé que solamente existían en las películas universitarias. Estoy asomando la cabeza por encima del hombro de Sage para tratar de ver cómo se desarrolla la cosa cuando Syv pronuncia mi nombre, así que doy los pasos necesarios para llegar junto a ella. Se me complica, porque veo como James se me cruza con intenciones de ir junto al novio de Hero, ese al cual la colorada rápidamente toma del brazo con obvias intenciones de jugar con él. Me puedo oler las intenciones, así que desvío rápidamente la mirada para no echarme a reír, que después de lo que pasó esta noche es mejor ni tocar el tema. Ya suficiente con que James llegó con algodón en la nariz.

— Siempre listo — doy una zancada larga que me endereza a su lado y tomo la pelotita, muerdo mi lengua porque eso de alguna manera ayuda a mi concentración y lanzo. Me encojo de hombros al ver que mi tiro no fue tan espectacular y me hago con uno de los vasos, ese que huelo antes de beber — ¿Qué se supone que tiene esto?

El miembro 'Kendrick O. Black' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Azar' :

Todo se pone tan sentimental demasiado rápido, que apenas llego a reaccionar a llevarme una mano al pecho haciendo un puchero — Estúpida mis sentimientos, idiota — murmuro a modo de broma, esa que se pierde por el sonido del timbre, el cual me toma totalmente con la guardia baja. Tengo que dejar de apoyarme en la cariñosa de Syv y me apoyo en el borde de la bañera, estirando el cuello como si de esa forma pudiese ver a quién se le ha ocurrido salir a estas horas, en una noche festiva. ¿Habrán vecinos mala onda que se quejen de nuestro ruido? — ¿Strippers? ¿Quién fue la lista? — creo que lo grito, que si mi instinto no falla… sep, deben ser los chicos. Me levanto y, aún de pie dentro de la bañera, levanto mi vaso ya vacío — ¡Pues yo siempre me veo bien y no necesito arreglarme! — lo arrastro, obvio que sí.

Antes de que pueda preguntar qué le pasó a James que lleva algodón en la nariz, ya se están organizando para jugar y tengo que ponerme a hacer algunos tragos con Mimi para poder colaborar al juego. En vista de que Syv se va con el pollera de su novio, yo tomo la mano de mi amiga morena y le beso los nudillos a modo de pantomima — Supongo que seremos tú y yo — le digo con una sonrisa y le guiño un ojo. Me acomodo del otro extremo de la mesa a los tortolitos, suelto a Mimi y me hago con una pelotita de color rosado — Yo digo que si nosotras ganamos, los chicos nos hagan un show de strippers — cosa que no tiene sentido si vemos los equipos, pero creo que la intención se nota. Y no, no me voy a quejar de seguir bebiendo.