Conan nació y creció en las ruinas de Londres, sitio que recuerda con mucho cariño a pesar de las pésimas condiciones de vida que azotan a Europa desde ya hace mucho tiempo. Sus padres murieron cuando era joven y su hermano mayor cuidó de él la mayor parte de su vida. Durante el bombardeo del año 51 por parte de los Black a la capital inglesa, el sobrino de Conan murió y su hermano se sumió en una depresión que lo llevó a la locura. Desde entonces se transformó en un seguidor activo del movimiento mágico y fue de los primeros magos en mudarse al distrito once cuando fue tomado por aquellos que en ese entonces eran rebeldes.

En NeoPanem conoció a quien sería su esposa, Phillipa Chesterton. Se casaron bastante pronto, poco tiempo después de la caída de los Black y se mudaron a una casona en las afueras del Distrito 01. Conan participó activamente en las nuevas reformas para la sociedad actual e inició una carrera en leyes mágicas que hoy en día lo mantiene como parte estable del Wizengamot.

Su relación con Laurence es la de un padre que teme que su hijo sufra las mismas atrocidades que él mismo tuvo que ver en su juventud, por lo que suele sobreprotegerlo a pesar de no tener idea de cómo hablar con él. Comparten el gusto por el Quidditch, deporte que ha utilizado para afianzar el vínculo que no sabe cómo mantener. Con Phillipa las cosas no son muy diferentes: la nueva guerra solo ha provocado que su matrimonio comience a deteriorarse, en especial por la sangre que su esposa tanto se preocupa por esconder delante de los demás.

Phillipa “Pippa” Chesterton nació en un distrito estable de NeoPanem, ahí donde solo sus padres tenían conocimiento de sus dones mágicos que le obligaban a callarse la boca debido a que el gobierno de los Black estaba en su esplendor. La muerte de su hermana menor en uno de los Juegos Mágicos fue lo que la motivó a unirse a los rebeldes cuando tomaron el once en el año 51, convencida de que éstos terminarían con la injusticia y que todo conflicto terminaría tarde o temprano. Fue allí donde conoció a Conan e inició una relación con él.

Se casaron poco después de la caída de los Black, pero el resto de su vida pareció desmoronarse. Sus padres fueron enviados al Mercado de Esclavos y fue su matrimonio con alguien activo dentro del movimiento político lo que la salvó de ser empujada a los distritos del norte, allí donde los sangre sucia eran recibidos en mejores condiciones que en los sitios más elitistas. En vista de que sus posibilidades de trabajo eran más escasas que las de su marido, inició su propio negocio de reparación de cuadros mágicos.

Trabajar en su propio estudio dentro de su casa le permitió estar mucho más presente en la vida de su único hijo. Siempre cuidó a Laurence como si fuera de cristal y lo crió para que se transforme en la perfecta imagen de un mago de alta sociedad, la única manera que tendría de sobrevivir en NeoPanem sin caer en la desgracia. No obstante, ha preferido callar su origen, cosa que el muchacho ignora y que solo un puñado de personas conocen. Sus dudas ante el gobierno actual y el miedo de averiguar qué ha pasado con sus padres ha comenzado a romper su matrimonio desde el inicio de la nueva guerra, pero esto Laurie no lo sabe.

Los señores Chesterton tuvieron una vida estable dentro del gobierno de los Black y, de todos modos, no pusieron mala cara cuando sus hijas demostraron tener dones mágicos. Comprensivos y atentos, sólo se preocuparon por hacerlas sentir seguras en un mundo que les daría la espalda. La muerte de su hija menor fue un golpe demasiado duro, uno que los mantuvo silenciosos y cautos hasta que Phillipa se marchó para unirse a los rebeldes mágicos en el año 51.

Tras la caída de los Black fueron apresados como la gran mayoría de los muggles de NeoPanem. Supieron la noticia del casamiento de su hija, pero jamás llegaron a escuchar sobre Laurence. Fueron enviados al Mercado de Esclavos y perdieron todo contacto con su familia; lo que fue de ellos ha sido un completo misterio.

¿Se han escapado y unido a algún movimiento político? ¿Fueron comprados y trabajan en algún sitio? No se sabe. Lo que nos importa es que están en algún lado, tratando de retomar el contacto con su única hija mientras que esperan que el mundo se torne un sitio más justo para todos.