Para Ezra Williams su árbol genealógico comienza con su hermano y termina con él. Si tiene que reconocer de donde proviene es para reafirmar la persona que es hoy en día, no para rememorar una época que, siendo francos, deja bastante que desear.

Ha borrado de sus recuerdos los pocos que tenía de las figuras que se hacían llamar sus padres, reduciéndolos a un simple relato para dar contexto a su existencia. Nació en Gran Bretaña, de donde su familia huyó tras el bombardeo de Londres para empezar una nueva vida en Neopanem. Con lo que no contaban era con que el país fuera atacado por la misma gente que estaban criando en su casa: magos.

Ezra descubrió que poseía sangra mágica al igual que su hermano mayor, Isaac, el motivo principal por el que sus padres huyeron y decidieron abandonarlos a su suerte. Por fortuna, se vieron favorecidos por el cambio de gobierno y, pese a que fue criado en su mayor parte por su hermano, se puede decir que Ezra se las apañó para hacer su propio hueco en un mundo del que, por primera vez, sentía que formaba parte.

Se graduó con honores de la Academia de Aurores, con un expediente brillante y uno de los más jóvenes en formar parte de misiones otorgadas a escuadrones de alta experiencia. Dedicó su veintena a mejorar su destreza y demostrar su valía, lejos de las distracciones propias de personas de su edad, recién cumplidos sus treinta y cinco años consiguió que lo nombraran ministro de defensa.