Nacido de la unión de Emilia Ruehl y un desconocido que desapareció antes de que su madre diera a luz, a él y a su hermana melliza Cora. La historia oficial es que se trató de un breve amorío de su madre con alguien que no debería y el hombre se esfumó de la faz de la tierra, abrumado por la responsabilidad de ser padre. Incluso se decía que había preferido irse al distrito 12 antes que quedarse en el 2 con la chica Ruehl. La verdad, en el fondo, es un secreto más entre el almacén de misterios del clan, una historia que él desconoce hasta el momento. Atticus pertenece a una familia criminal, traficantes de pociones y objetos malditos con un negocio antiguamente consolidado en el distrito 2, en la que su madre nunca fue el miembro más importante. Él se aseguró desde joven que no le sucediera lo mismo y las ansías de ser considerado un elemento útil para los Ruehl se volvió una motivación fuerte en su vida.

Se crió bajo el ala de su tío Lucien durante los primeros años después de su primera muestra de magia, siendo cuidado ocasionalmente por su madre quien concentró más su cariño en su hermana Cora que en él. La mujer entendía que al haber tenido un varón, lo había perdido por las fauces de su familia y su hija era más suya que Atticus. Él por su parte tiene más presente a su tío que a Emilia en sus recuerdos de infancia y gracias a la influencia del primero, no aprendió mucho a respetar a la segunda. Se caracterizó por ser un niño complicado y propenso a los regaños, si bien se le dejaba claro a menudo que en él no recaería el negocio familiar y por lo tanto sus pequeños líos pasaban frecuentemente desapercibidos. Ese puesto de herederos estaba reservado para Anne y Paul, sus primos por parte de Lucien… pero los príncipes nunca llegaron a usar la corona del rey. Paul falleció y cuando Atticus tenía ocho años, Anne delató las actividades ilegales del clan a las autoridades, en una jugada que casi destruye a la familia.

Emilia llevó a sus hijos al norte ante la calamidad que cayó sobre los Ruehl, todos buscando escapar de la justicia y de una buena temporada tras las rejas o algo peor. Durante unos años vivieron sólo los tres, su madre, su hermana y él, rodeados de rufianes y criminales de una calaña peor de lo que estaban acostumbrados. Esa temporada lejos del resto de su familia en el distrito 5 la recuerda como de las peores de su vida; privado de sus anteriores comodidades, en la extrema pobreza y bajo el régimen de los Black, Atticus se encontraba constantemente frustrado y enojado por sus circunstancias. Su madre lo vio como una oportunidad para reparar relaciones y ganarse el cariño de ambos de sus hijos, pero eventualmente sus intenciones de alejarse de los males que rodeaban a los Ruehl quedaron en la nada. Siendo los mellizos adolescentes, Emilia contrajo una enfermedad que la mató en cuestión de semanas. Para suerte de los chicos, al poco tiempo de morir su madre, Lucien los encontró y los reunió con el resto de la familia en el distrito 12.

Supo entonces que los Ruehl se habían reorganizado dirigiendo un nuevo negocio, muy parecido al anterior. Su papel en el mismo cobró importancia, aunque sus aspiraciones de volverse una pieza indispensable nunca tomaron vuelo. Él no era nieto ni hijo del patriarca. Por más que lo intentara y por más información que supiera y más habilidades que demostrara, en él no recaería mayor responsabilidad aparte de la de ayudar cuando se le necesitara, con lo que fuese. Se ensució las manos por los suyos con tal de asegurar su supervivencia, y todavía lo hace. Dándose cuenta de que era libre del peso del “deber familiar”, Atticus se planteó trazar su propio camino y disfrutar de los beneficios que andar por su cuenta pudiera traerle. Tenía 16 años cuando el imperio de los Black y todo su poder cayó en manos de los Niniadis, por lo que con ello, se abrieron nuevas posibilidades que aprovechó.

Regresó al distrito 5 mandado por Lucien para que ayudara desde allí en los negocios familiares, siendo una zona en la que abundan los tratos clandestinos (el mercado perfecto para los Ruehl), y entró a estudiar en el colegio Royal para especializarse en Magizoología cursando algunas materias también del área de Defensa. Durante los últimos años se había despertado en él un interés por las criaturas mágicas, aunque su interés poco tenía que ver con el estudio académico de las mismas. Vio en ellas una oportunidad de lucrarse a su costa a través de su captura y la comercialización de ingredientes provenientes de ellas, como pelo, garras, partes del cuerpo o sangre así que enfocó su educación en buscar cómo beneficiarse económicamente. Al acabar sus estudios en el Royal, consideró la idea de unirse al departamento de defensa civil pero ya que tenía los conocimientos para ir por su cuenta, ¿por qué lo haría?

Atticus se dio a la mala vida, era lo único que conocía. Decidió a formar algo así como su negocio personal: se volvió un cazador de criaturas hábil, capaz de rastrear bestias y seres de cualquier tipo para luego capturarlos y comercializarlos entre sus contactos en el mercado negro. Fue una época en la que contó con una nada despreciable cantidad de dinero en su poder, que procuró administrar lo mejor que pudo aunque sus vicios e impulsos frecuentemente se interponían en su camino. Se manejaba con prudencia para no llamar la atención de ninguna autoridad que fuese a detenerlo pero su pericia a la hora de hacer su trabajo atrajo la atención de un auror que, antes que interponerse, se interesó por formar una alianza. Juntos hicieron un acuerdo: él le daría parte de sus ganancias al auror y el hombre a cambio le proveería información útil para esquivar a las autoridades con la promesa de que no avisaría a los aurores de sus actividades. Sin embargo, antes de que se diera cuenta, su alianza en cuestión de meses adquirió otros tintes aparte de los legales.

Ambos hombres comenzaron una relación amorosa que duraría un tiempo. Se enamoró perdidamente del auror y por un tiempo, Atticus vivió un periodo de estabilidad en el que creyó que había alcanzado todo lo que quería en la vida y aunque no tenía grandes esperanzas de tener una familia o cambiar sus modos, fue una relación intensa que consideró un oasis en medio de la tormenta política que atravesaba el país. La felicidad le duró poco, porque unos meses después descubrió que su pareja no era la persona que él creía y viéndose engañado y usado, Atticus optó por la venganza. Lo acusó con el Ministerio de corrupción, causando la pérdida de su trabajo en el Cuartel de Aurores y su posterior desaparición. Desconoce qué fue de él, si está en prisión, si murió o fue enviado a otro distrito pero está convencido de que destruyó su vida así como el hombre acabó con la suya.

Por ese contacto con el Ministerio al acusar a su expareja, acabó en el radar del gobierno y su experiencia con criaturas mágicas le abrió camino en la entidad. Se le ofreció un trabajo para entrar al escuadrón de cazadores en el Ministerio de Defensa, empleo que aceptó tras considerar los beneficios que tendría, entre ellos el acceso a información privilegiada sobre criaturas y más ingresos de galeones a su disposición. Se mudó al distrito 4 por sus playas, en busca de una mejor calidad de vida ahora que trabajaba para el gobierno y con la intención de dejar su decepción amorosa atrás; todo esto ocurrió poco antes de la muerte de Jamie Niniadis y que la presidencia del país volviera a cambiar con la llegada de Magnar Aminoff, a quien considera un simpatizante de gente como él. Lleva sus buenos años trabajando para el escuadrón de cazadores, paralelo a ser un colaborador también de los suyos, pero sólo se dio cuenta de que trabajaba en la misma área con su prima Anne, quien décadas atrás los delató, cuando la mujer fue nombrada Ministra de Defensa el año pasado.

Con la muerte de Lucien y la aparición de Anne, Atticus ve una oportunidad para hacerse con el control de la familia y ganar el poder que siempre había deseado. El león alfa de la manada ha desaparecido junto con su linaje y los negocios son una mina de oro que cualquiera desearía tener. Sin embargo, no es el único que ambiciosa el liderazgo del clan y actualmente se maneja con cuidado respecto a Anne y su tío Kaine, ya que sabe que pueden ser tan peligrosos como él… está esperando el momento adecuado para atacar.