Realmente si ese niño no fuera mi sobrino y el más adorable de todos no estaría viajando a ser niñero por ya no se cuantas veces este mes. Pero lo era y no tenía ningun otro plan, mi trabajo estaba entregado y Viktor estaba actuando raro ultimamente. Ugh necesitaba otro amante, tener uno solo era una mierda.

Cuando llego a la casa de mi hermano, me encuentro con este y Rory esperandome en el salon pasando tiempo de calidad antes de que deba ir a trabajar. Uno pensaría que un auror tan grandote como Jack sería frío y le daría miedo al pequeño, pero nada estaba más alejado de ese pensamiento que lo que tenía frente a mis ojos.

Rory reía a carcajadas y buscaba tocar a su padre, mientras a este se le iluminaban los ojos de amor y se le caía la baba, era una escena realmente enternecedora pero lamentablemente no era alguien que disfrutara viendo momentos cursis, así que interrumpí tosiendo para llamar la atención.

- ¿Cómo se encuentran los unicos muchachos que necesito en mi vida? - pregunté sonriendo - Traje empanadas y vino para cenar - levante la bolsa que traía donde obviamente tenía un jugo extra para el enano - ¿Rose esta? ¿O puedo exederme en mis abrazos?