OTOÑO de 247521 de Septiembre — 20 de Diciembre
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Tras años de represión y batallas libradas, hoy son los magos los que caminan en las calles más pulcras del Capitolio. Bajo un régimen que condena a los muggles y a los traidores a la persecución, una nueva era se agita a la vuelta de la esquina. La igualdad es un mito, los gritos de justicia se ven asfixiados.
Existen aquellos que quieren dar vuelta el tablero, otros que buscan sembrar la paz entre razas y magos dispuestos a lo que sea para conservar el poder que por mucho tiempo se les ha negado. La guerra ha llegado a cada uno de los distritos.
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Bibi C. Blythe
And they caught her by the throat and filled her veins with steel, and bled her dry until she screamed for gods, who never really loved her after all.
and did they not have everything, these beautiful, tragic beings?
La figura de Augustus Blythe dejando aquel burdel del distrito 7, con su traje a medida y sus aires de superioridad, pasó más que desapercibida en un establecimiento como aquel. Club de reunión habitual —y extraoficial— para magos, lo que sí desentonaban eran sus ideales, ya que se le llenaba la boca de decir que jamás miraría dos veces a una veela. O de eso se jactaba él.
A la tierna edad de dos años y en brazos de su padre, la inocente Tabitha apenas era capaz de concebir las brillantes y llamativas luces de neón que adornaban el burdel, a pesar de que era lo único que había conocido en su corta vida.
Se aseguró de ser discreto, eso sí. Nadie supo que lo que había ido a buscar allí no era un rato agradable, sino más bien el fruto del mismo. Nadie, a excepción de aquella veela cuyo silencio compró con facilidad, valiéndose de la desesperación de una madre que solo buscaba alejar a su hija de aquella prisión con sábanas de seda.
Una boca que alimentar a cambio de mantener su imagen pública intacta le resultó hasta le barato, y es que Augustus era un hombre que despreciaba los escándalos, cerciorado de seguir siempre aquel mantra que le había salvado en épocas en las que debía esconderse para sobrevivir: que se queme la casa, pero que no salga el fuego.
A la tierna edad de dos años y en brazos de su padre, la inocente Tabitha apenas era capaz de concebir las brillantes y llamativas luces de neón que adornaban el burdel, a pesar de que era lo único que había conocido en su corta vida.
Se aseguró de ser discreto, eso sí. Nadie supo que lo que había ido a buscar allí no era un rato agradable, sino más bien el fruto del mismo. Nadie, a excepción de aquella veela cuyo silencio compró con facilidad, valiéndose de la desesperación de una madre que solo buscaba alejar a su hija de aquella prisión con sábanas de seda.
Una boca que alimentar a cambio de mantener su imagen pública intacta le resultó hasta le barato, y es que Augustus era un hombre que despreciaba los escándalos, cerciorado de seguir siempre aquel mantra que le había salvado en épocas en las que debía esconderse para sobrevivir: que se queme la casa, pero que no salga el fuego.
golden cups, sparking champagne, and collection of scars
La toma de poder de Niniadis supuso un cambio de lo más favorable, otorgándole ciertos privilegios que vinieron de la mano de un estatus social más alto e influyente, tales como un puesto de abogado en el Ministerio de Justicia y una residencia más que decente en el Capitolio, y es por eso que Bibi nunca conoció realmente la necesidad.
Creció rodeada de lujos y comodidades, colmada de caprichos que buscaban suplir la falta atención que su padre nunca había tenido intención de darle y que ella aceptaba de buena gana, demasiado joven e inocente como para cuestionar de la actitud interesada detrás de aquellos gestos.
Podría decirse que durante mucho tiempo tuvo una idea equivocada de lo que era el amor, teniendo en cuenta que su cuidado corría la mayoría de veces a cargo de los muggles que servían en su casa.
El fantasma de su madre también aparecía de vez en cuando en sus preguntas, las cuales casi nunca eran respondidas a no ser que fuera para menospreciar a la veela que le había dado la vida, por lo qué con el tiempo, Bibi asumió que no iba a recibir respuestas útiles, al menos no de su padre.
Creció rodeada de lujos y comodidades, colmada de caprichos que buscaban suplir la falta atención que su padre nunca había tenido intención de darle y que ella aceptaba de buena gana, demasiado joven e inocente como para cuestionar de la actitud interesada detrás de aquellos gestos.
Podría decirse que durante mucho tiempo tuvo una idea equivocada de lo que era el amor, teniendo en cuenta que su cuidado corría la mayoría de veces a cargo de los muggles que servían en su casa.
El fantasma de su madre también aparecía de vez en cuando en sus preguntas, las cuales casi nunca eran respondidas a no ser que fuera para menospreciar a la veela que le había dado la vida, por lo qué con el tiempo, Bibi asumió que no iba a recibir respuestas útiles, al menos no de su padre.
the room is full but all she see is they way his eyes just stab through her.
Su infancia estuvo plagada de normas de conducta y etiqueta, además del recordatorio constante de no mencionar la palabra semi-veela. Era imprescindible, pues a ojos del mundo Bibi poseía la más pura de las sangres y era digna portadora del apellido Blythe. Mantener la buena imagen de la familia y su alta posición social era imperativo, al margen de cual fuera la realidad.
Fue un año después del cambio de gobierno cuando Noah llegó a su vida. Fruto de su padre con su recién estrenada mujer, Bibi asumió el papel de hermana mayor casi inconscientemente. La bondad e inocencia que desprendía aquel crió bastaban enternecer el corazón de Bibi, a quién le salía de forma natural, casi inconsciente, protegerle del inhóspito mundo al que había llegado.
Mientras tanto, ella se desvivía por la aprobación y el orgullo de su padre, pero ni siquiera su impecable rendimiento en el Royal pareció bastar para recibir señal alguna de orgullo, más allá de un asentimiento puntual. Sin embargo, para el resto del mundo Bibi tenía una vida perfecta, y a ella le gustaba pensar que así era. Vivía en una burbuja de cristal, negándose a pensar que no fuera amada y valorada. Quizá por eso el bofetón de realidad fue tan grande.
Y es que Augustus nunca mostró un interés real en ella, hasta que lo hizo. Era una idea que llevaba bastante tiempo rondándole la cabeza, y Bibi apenas acababa de cumplir los trece años cuando se decidió a ponerla en marcha, empeñado en que aquel desliz de hacía ya tantos años le reportara beneficios. Sólo tenía que jugar bien sus cartas.
Fue un año después del cambio de gobierno cuando Noah llegó a su vida. Fruto de su padre con su recién estrenada mujer, Bibi asumió el papel de hermana mayor casi inconscientemente. La bondad e inocencia que desprendía aquel crió bastaban enternecer el corazón de Bibi, a quién le salía de forma natural, casi inconsciente, protegerle del inhóspito mundo al que había llegado.
Mientras tanto, ella se desvivía por la aprobación y el orgullo de su padre, pero ni siquiera su impecable rendimiento en el Royal pareció bastar para recibir señal alguna de orgullo, más allá de un asentimiento puntual. Sin embargo, para el resto del mundo Bibi tenía una vida perfecta, y a ella le gustaba pensar que así era. Vivía en una burbuja de cristal, negándose a pensar que no fuera amada y valorada. Quizá por eso el bofetón de realidad fue tan grande.
Y es que Augustus nunca mostró un interés real en ella, hasta que lo hizo. Era una idea que llevaba bastante tiempo rondándole la cabeza, y Bibi apenas acababa de cumplir los trece años cuando se decidió a ponerla en marcha, empeñado en que aquel desliz de hacía ya tantos años le reportara beneficios. Sólo tenía que jugar bien sus cartas.
they are so dark, so deep, the secrets that she keeps.
Al principio supo ser sutil, dándola instrucciones claras y concisas, con la discreción como regla absoluta: palabras amables edulcoradas de alguna sonrisa encantadora a según que funcionario del Ministerio, los cuales apenas eran conscientes de lo que sus palabras revelaban, cautivados por sus encantos de veela.
Por supuesto, a Bibi no le pasó desapercibida la hipocresía detrás aquellos encargos, y fue entonces cuando la realidad cayó sobre ella sin piedad: aquella aprobación y orgullo paternos que tanto había anhelado jamás habían sido suyos. Para su padre ella no era más que un instrumento a su favor, un medio para lograr un fin.
Claro que Augustus no era de los que aceptaba negativas sin más, y terminó sustituyendo las palabras amables por las amenazas veladas, con la promesa de mover hilos y relacionarla con la última protesta rebelde si no hacía lo que se esperaba de ella.
Así, lo que comenzó con preguntas inocentes y palabras aduladoras terminó en noches de hotel cuando Bibi cumplió cierta edad, aunque el método era el mismo: engatusar y cautivar a hombres influyentes, usando sus encantos de veela con el único fin de sacar información de interés, la cual Augustus usaba para chantajear y extorsionar en favor del apellido Blythe, logrando escalar puestos hasta llegar a la cámara del Wizengamot.
Por supuesto, a Bibi no le pasó desapercibida la hipocresía detrás aquellos encargos, y fue entonces cuando la realidad cayó sobre ella sin piedad: aquella aprobación y orgullo paternos que tanto había anhelado jamás habían sido suyos. Para su padre ella no era más que un instrumento a su favor, un medio para lograr un fin.
Claro que Augustus no era de los que aceptaba negativas sin más, y terminó sustituyendo las palabras amables por las amenazas veladas, con la promesa de mover hilos y relacionarla con la última protesta rebelde si no hacía lo que se esperaba de ella.
Así, lo que comenzó con preguntas inocentes y palabras aduladoras terminó en noches de hotel cuando Bibi cumplió cierta edad, aunque el método era el mismo: engatusar y cautivar a hombres influyentes, usando sus encantos de veela con el único fin de sacar información de interés, la cual Augustus usaba para chantajear y extorsionar en favor del apellido Blythe, logrando escalar puestos hasta llegar a la cámara del Wizengamot.
they forgot that spring is rebirth, that if anyone could be touched by the underworld and flourish, that'd be her.
Bibi tragó y aguanto durante mucho tiempo, hasta que no pudo más. Una noche, sin tener todavía cumplidos los 19, se marchó, dejando una parte de su corazón en aquella casa, con Noah. Puso distancia de por medio y se dirigió al norte, atendiendo a los susurros que decían que allí se reunían refugiados, pues su condición de semi-veela tampoco le brindaba muchas más opciones.
Una vez allí se limitó a buscarse la vida, haciendo gala de su ingenio y sus recursos para conseguir comida y techos donde pasar la noche. Conoció a gente de todo tipo, hizo favores y consiguió contactos, encontrando un lugar en el contrabando de objetos, comida o, simplemente, de personas que buscaban huir del gobierno.
Era buena en lo suyo, eso nadie podía negárselo. Superaba fronteras y registros imprevistos valiéndose de sus encantos de veela, como solía hacer. Salvo que, en aquellas ocasiones, podía decir que lo hacía por y para ella, sin nadie que la usara para su beneficio.
Fue gracias a aquellos contactos que consiguió averiguar que su hogar no siempre había sido el Capitolio, y que su madre había fallecido en aquel burdel del distrito 7.
Una vez allí se limitó a buscarse la vida, haciendo gala de su ingenio y sus recursos para conseguir comida y techos donde pasar la noche. Conoció a gente de todo tipo, hizo favores y consiguió contactos, encontrando un lugar en el contrabando de objetos, comida o, simplemente, de personas que buscaban huir del gobierno.
Era buena en lo suyo, eso nadie podía negárselo. Superaba fronteras y registros imprevistos valiéndose de sus encantos de veela, como solía hacer. Salvo que, en aquellas ocasiones, podía decir que lo hacía por y para ella, sin nadie que la usara para su beneficio.
Fue gracias a aquellos contactos que consiguió averiguar que su hogar no siempre había sido el Capitolio, y que su madre había fallecido en aquel burdel del distrito 7.
oh darling, i've got history in my blood.
La presidencia de Aminoff abrió puertas y oportunidades a gente como ella, y puso a su alcance una vida en la que no tenía que esconderse. Surgieron dudas e inquietudes pero finalmente se aferró a aquella idea, trasladándose al distrito 7 dónde, a fin de cuentas, había pasado sus primeros años de vida.
Librarse de las viejas costumbres es difícil por lo que actualmente sigue viviendo de sus chanchullos como contrabandista para aquel que lo necesite.
Librarse de las viejas costumbres es difícil por lo que actualmente sigue viviendo de sus chanchullos como contrabandista para aquel que lo necesite.
Bibi suele mostrase bastante escéptica y desconfiada con la mayoría de las personas, con toques ligeramente bordes, aunque se presta a tender una mano amiga cuando alguien supera sus expectativas. Tiene ese punto sarcástico que compensa con su atrayente carisma y personalidad, siendo una persona bastante tenaz y fuerte mentalmente.
Aquel bofetón de realidad, sumado a la experiencia que da la madurez, han hecho de ella una persona realista y práctica, con los pies en la tierra y guiada más bien por la lógica. A fin de cuentas, su ingenio y su sensatez es lo que la han mantenido con vida hasta ahora.
Contrariamente a los deseos de su padre, nunca terminó de calar en ella la ideología purista y pro-magos que él tanto predicaba, teniendo ideales bilaterales desde bien pequeña.
La decisión de mudarse al 7 no fue solo un arrebato por volver a sus raíces, sino más bien el deseo de, alguna forma, estar más cerca de Noah, aunque eso le pueda traer problema a largo plazo.
Su primera muestra de magia ocurrió a los cuatro años, cuando sin pretenderlo terminó deshojando una margarita de su jardín. Apenada por haberse quedado sin pétalos, hizo que volvieran a crecer en un visto y no visto.
Siempre tuvo cierto interés por la medimagia e incluso comenzó a prepararse para especializarse en tratamiento de venenos. Es algo que por el momento ha descartado, aunque en un mundo idílico ser sanadora sería su puesto ideal.
Es alérgica al coco, cosa que descubrió a las malas cuando era pequeña y acabó ingresada en el Hospital.
Su varita es de arce, con núcleo de nervios de corazón de dragón, de 26.2 cm y vagamente flexible.
Es claustrofóbica aunque de forma totalmente irracional, pues desde que tiene uso de memoria le ponen bastante nerviosa los espacios pequeños, aunque no haya motivo aparente para ello.
Bastante privada con sus asuntos y, en definitiva, con su vida, si algo aprendió desde pequeña es a ser discreta y a no exponerse. Que se queme la casa, pero que no salga el fuego.
Posee videncia, heredada de su madre junto con el resto de dones de veela. Además, por cortesía de los mismos, también es capaz de transformarse en halcón y en lobo, aunque estas últimas no son habilidades de las que haga un uso frecuente. Solía hacerlo más en su época en el norte, cuando le resultaban útiles para pasar desapercibida.
No quiere admitirlo y no lo hará, pero los "trabajos" que hacía para su padre han hecho mella en ella, provocando que no lleve bien el contacto físico. Es un asunto complicado que le cuesta, aunque no es algo de lo que le guste hablar. En general, no se le da bien expresar sus emociones y tiende a guardarse sus problemas para ella.
Aquel bofetón de realidad, sumado a la experiencia que da la madurez, han hecho de ella una persona realista y práctica, con los pies en la tierra y guiada más bien por la lógica. A fin de cuentas, su ingenio y su sensatez es lo que la han mantenido con vida hasta ahora.
Contrariamente a los deseos de su padre, nunca terminó de calar en ella la ideología purista y pro-magos que él tanto predicaba, teniendo ideales bilaterales desde bien pequeña.
La decisión de mudarse al 7 no fue solo un arrebato por volver a sus raíces, sino más bien el deseo de, alguna forma, estar más cerca de Noah, aunque eso le pueda traer problema a largo plazo.
Su primera muestra de magia ocurrió a los cuatro años, cuando sin pretenderlo terminó deshojando una margarita de su jardín. Apenada por haberse quedado sin pétalos, hizo que volvieran a crecer en un visto y no visto.
Siempre tuvo cierto interés por la medimagia e incluso comenzó a prepararse para especializarse en tratamiento de venenos. Es algo que por el momento ha descartado, aunque en un mundo idílico ser sanadora sería su puesto ideal.
Es alérgica al coco, cosa que descubrió a las malas cuando era pequeña y acabó ingresada en el Hospital.
Su varita es de arce, con núcleo de nervios de corazón de dragón, de 26.2 cm y vagamente flexible.
Es claustrofóbica aunque de forma totalmente irracional, pues desde que tiene uso de memoria le ponen bastante nerviosa los espacios pequeños, aunque no haya motivo aparente para ello.
Bastante privada con sus asuntos y, en definitiva, con su vida, si algo aprendió desde pequeña es a ser discreta y a no exponerse. Que se queme la casa, pero que no salga el fuego.
Posee videncia, heredada de su madre junto con el resto de dones de veela. Además, por cortesía de los mismos, también es capaz de transformarse en halcón y en lobo, aunque estas últimas no son habilidades de las que haga un uso frecuente. Solía hacerlo más en su época en el norte, cuando le resultaban útiles para pasar desapercibida.
No quiere admitirlo y no lo hará, pero los "trabajos" que hacía para su padre han hecho mella en ella, provocando que no lleve bien el contacto físico. Es un asunto complicado que le cuesta, aunque no es algo de lo que le guste hablar. En general, no se le da bien expresar sus emociones y tiende a guardarse sus problemas para ella.
04
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06
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Tabitha Colette Blythe
27/09/2448
Distrito 7
Civil
Sangre mestiza, semi-veela
Josie Lane
27/09/2448
Distrito 7
Civil
Sangre mestiza, semi-veela
Josie Lane
Bibi
tabitha colette blythe
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